Los cuentos hacen crecer la imaginación, impulsan la creatividad, el pensamiento abstracto del niño y otras habilidades y emociones.
También suponen un vínculo de unión entre el adulto y el niño. Ayuda a mantener la calma, a relajarse y a conseguir un ambiente cálido, acogedor y tranquilo.
Contar cuentos a los niños ayuda a trabajar la empatía. A través de la narración de historias, conseguimos que los niños se metan en la piel de los personajes, vivan sus alegrías, sorpresas, miedos y sus penas. Ponerse en los zapatos de los personajes y vivir sus emociones hace que sea más fácil comprender las moralejas de los cuentos.
Para ello, he preparado con mucha ilusión esta "Maleta Cuentacuentos", de la que saldrán historias increíbles, personajes fantásticos y otros objetos mágicos y misteriosos: varita mágica, antifaz, nariz de payaso, marionetas y todo aquello que pueda dar vida a los cuentos. ¡ÉXITO ASEGURADO!
Les contó historias espeluznantes con las que pasamos un poco de miedo, pero también nos echamos unas buenas risas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario